martes, 12 de abril de 2011

Las paradojas de la Dominación Femenina (DomFem)


Ya en su momento me resultó chocante descubrir que el mundo de la DomFem era paradójico, un mundo en el que nada parecía ser lo que era, como el País de las Maravillas de Alicia. No es fácil moverse en un mundo al revés, en el que el dolor puede ser placentero y la humillación deseable, y las cosas se complican más aún cuando estas "leyes" no se cumplen para todos sus habitantes... ¿os imaginais un mundo donde la gravedad afectara sólo a algunas personas, o en el que no para todo el mundo el sol saliera cada día? Pues así me siento a veces... desconcertada.

Quizá es que mi manera de vivir la Dominación sea un submundo dentro de un submundo, un vestigio de épocas pasadas a las que quizá no sea bueno volver. A mi entender, la "Dueña", por decirlo de alguna manera, cuida y se hace cargo de la persona que está bajo su tutela, y se preocupa de su bienestar, porque al fin y al cabo es alguien a quien valora, y en un mundo coherente, eso debería producir un sentimiento de pertenencia, de sentirse protegido, de sentirse especial. Mis perros, por ejemplo, los de cuatro patas por supuesto, entrarían dentro de este modelo lógico. Cuanto más les cuido más quieren permanecer cerca de mi. Hay quien puede interpretar esto como dependencia, pero en personas adultas eso depende mucho de la personalidad de cada cual. Yo prefiero interpretarlo como interés.

En este mundo al revés de la DomFem parece que en la mayoría de los casos esto produce precisamente el efecto contrario, es decir, cuanto más te preocupas o te interesas por alguien, más se aleja de ti. Me atrevo a pensar que podría estar dándose el famoso postulado que reza así: "la tengo en el bote, ya no hace falta que me esfuerce", y es que el caso opuesto también sucede, que cuanto menos te interesas más te persiguen. También se le añade otro aspecto que me cuesta llegar a entender y que alguien me comentó hace unos días, y es que cuando una Ama se interesa y le cuida, se siente menos perro, que es precisamente lo que quiere sentir.

Comentando esto con mis perros, que son muy comprensivos y atentos conmigo, me di cuenta en su forma de mirarme que estaban tan desconcertados como yo misma, y que no podían llegar a entender que alguien pudiera sacrificar los mimos y el cariño, por el descuido y el desinterés, o que se interpretara esta forma de atenderles como sinónimo de debilidad y falta de carácter.

Quizá tenga que acostumbrarme a la idea de que mi forma de entender la DomFem está destinada a la extinción...


3 comentarios:

  1. Yo creo que esa "dejadez" se da en muchas relaciones y no solamente en BDSM, a nivel sentimental y también entre amistad. Nos solemos acomodar sin darnos cuenta a veces.
    Pero es muy bonito esforzarse y ver que la otra persona se esfuerza para que no ocurra eso, bien sea un amigo o tu pareja, sea Ama o no.

    Gracias por compartir sus inquietudes con nosotros. Saludicos Señora.

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  2. Estimada Ama Alyna. De vez en cuando ojeo los blogs y dejo el comentario referido a un tema en cuestión, sin importarme la fecha en la que se subió, sino más bien el contenido. He visto este pensamiento suyo y coincido en mucho con Usted. En lo primero que coincido es en lo paradójico del tema, la Dominación Femenina. En efecto, es chocante que personas que disfrutan de la Dominación, así como de las que lo hacemos de la sumisión, digamos que es lo que nos gusta, incluso yendo contra corriente. A pesar de todo lo que rodea esta forma de ver y vivir la vida, y por ende la sexualidad, en la que intervienen entre otras muchas cosas como lo es el afecto, también hay castigos físicos y humillaciones, y es una forma sana, porqué no, de respetar a tu sumiso y tratarle con el respeto que toda persona merece dentro del papel que juega cada uno y así buscar el placer. Como dice parte del título, es paradójico que esta forma de ver la sexualidad íntima de cada individuo, sea totalmente contraria al mal trato al que muchas otras personas hacen referencia, y aseguro que no hay nadie en este mundo que trate con más cariño y respeto a un sumiso, que una auténtica Ama, o lo que es lo miso, la Dueña de éste.
    Por último un par de cosillas. Primero, yo como sumiso, no me molesta en absoluto, y mucho menos me humilla que se me compare con un perro, pues son seres maravillosos que tendríamos que aprender de ellos tal y como estamos dejando el mundo nosotros, no ellos. Así que decir a un sumiso eres un perro, más bien es un halago. Y referente a la extinción del FemDom, creo que entre todos estamos aniquilando la verdadera esencia de la Dominación Femenina, especialmente los pseudo-sumisos o que se meten en los foros, blogs, etc. para resolver su propia satisfacción, así como algunas Amas que pretenden sentar cátedra e imponer su forma de ver la Dominación a un sumiso como si estuvieran en posesión de la verdad. Cada Dómina tiene, al igual que los sumisos, sus propios límites y forma de dominar a un sumiso, y no por ello son menos Dóminas. El verdadero FemDom, sino se le cuida, pasará lo del refrán, que entre todos la mataron y ella sola se murió. Es cuestión de mantener el esfuerzo en ambos sentidos, tanto de la Dueña al sumiso, como del sumiso a su Ama.

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  3. Sacher Masoch, estoy de acuerdo en que los perros son unos animalitos muy especiales, yo tengo dos y los adoro, y deberíamos aprender mucho de ellos. Por esa razón, igual que no puedo insultar a mi sumiso, ni despreciarle, porque si está conmigo es porque le aprecio, tampoco puedo usar el apelativo de "perro" de otra forma que no sea parecida a "cachorrito".

    Es cierto, cada cual tenemos nuestro estilo y la gracia está en respetar las particularidades, no intentar convertirnos tod@s en imagen y semejanza de unos estereotipos, y de esa manera, cuando encontremos a esa personita con la que encajemos, viviremos la FemDom desde su esencia.

    Gracias por tu reflexiva opinión :).

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